Familias del Colegio San Isidro ante la jubilación del conserje

Un colegio tiene muchos actores que hacen posible su funcionamiento en el día a día y hoy queremos rendir homenaje a una persona muy importante que la próxima semana cierra una etapa laboral para continuar con otra vital: nuestro querido conserje Alberto.

Cada mañana nos espera en el cole con una sonrisa, disponiendo todo para asegurar una entrada ordenada y con su sentido del humor, colecciona sonrisas que va guardando en algún lugar especial. A veces hace de guardián y cuida de nuestro Cole, nos ha ayudado a mantener todo limpio y nos enseña a cuidar de nuestro patio, porque a ser un buen ciudadano se aprende desde la infancia.

También es un manitas y nos ha hecho muchos arreglos, algunos muy grandes que han implicado más esfuerzo de lo que el deber exige (ojalá más medios para facilitar la labor de los conserjes).

Cuando llega el invierno, se asegura de tenernos calentito el Cole para que nuestros hijos no pasen frío.

Has sido un eslabón de la comunidad educativa que facilita no solo el trabajo de los docentes, sino que nos ha apoyado a las familias en todas nuestras iniciativas. Lo hemos visto disfrazado en Halloween, se ha enfundado un traje rojo navideño para repartir alegría, nos ha ayudado en el Ampa en todas las aventuras: carnavales, competiciones, fiestas.

Una joya de persona a la que hoy queremos decirle a través de esta tribuna, que le vamos a echar de menos.

Gracias, querido Alberto, por estos años de servicio y dedicación, las familias del Colegio Público San Isidro te queremos decir que ésta siempre será tu casa. Disfruta mucho de tu jubilación.