Se buscan inquilinos que controlen las plagas de mosquito tigre

Aranjuez acoge varias cajas-refugio para murciélagos con el fin de que estos mamíferos alados mantengan a raya las plagas de mosquito tigre, reduciendo así el uso de productos químicos para el control de estas poblaciones de insectos.

El mosquito tigre forma parte de la dieta del murciélago, que puede comer entre un millar y 3.000 mosquitos al día además de otro tipo de insectos que causan problemas a personas y mascotas, como la mosca negra.

Estas instalaciones están acogidas a un proyecto piloto de la Dirección General de Biodiversidad y Gestión Forestal de la Consejería de Medioambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid en colaboración con el área de Medioambiente del Ayuntamiento y se han colocado en zonas verdes y ajardinadas.

Las cajas-refugio se han colocado en grupos de 5 y 6 unidades en distintos árboles -previamente elegidos por su morfología, orientación y estar libres de barreras- pero próximas entre sí, formando una colonia.

Las nuevas casas están construidas con una mezcla de serrín de madera, cal, cemento y otros aditivos que proporciona gran durabilidad en la intemperie y resistente al ataque de los pájaros carpinteros. En su interior reina un microclima adecuado por su capacidad aislante y transpiración.

Se prevé que los nuevos inquilinos sean de la especie de murciélagos enanos, abundante en España y muy común en hábitats humanizados.

El control de estas plagas se llevan a cabo desde el ámbito de la salud pública, recogidas en el Programa de Vigilancia Entomológica y Control Sanitario-Ambiental del mosquito tigre (Aedes albopictus).