Los Agentes Forestales vigilan para evitar incendios por imprudencias

La Comunidad de Madrid está supervisando en estas fechas estivales el uso de la maquinaria agrícola para evitar fuegos en el campo, en una época en que se multiplican los factores de riesgo de los incendios forestales.

El Cuerpo de Agentes Forestales está comprobando que los agricultores aplican las medidas preventivas recogidas en el Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Incendios Forestales (INFOMA) del Gobierno autonómico.

Algunas de ellas son que el agricultor deberá informar de sus tareas, horarios y localización en el teléfono gratuito 900 720 300 siempre y cuando se vaya a utilizar a menos de 400 metros de los terrenos cualquier elemento que pueda generar chispas, descargas eléctricas o deflagraciones.

La maquinaria, como las cosechadoras, tendrán que portar obligatoriamente dos batefuegos, dos extintores de polvo de al menos seis kilos cada uno o mochilas con agua.

También la normativa estipula que deberá haber una persona situada a una distancia prudencial atenta a los trabajos portando un teléfono móvil con el que poder llamar al 112 en caso necesario.

Entre las recomendaciones están el empezar los trabajos en la parte contraria a la dirección del viento para después ir haciendo fajas perpendiculares hacia su procedencia, además de hacer las labores en un recorrido perimetral a la parcela de al menos 8 metros de anchura.

Si el viento es superior a los 20 km/h, con sequedad extrema y en parcelas mayores a las 20 ha la maquinaria a usar deberá permitir el arar una franja de 10 m en las zonas limítrofes o próximas a los árboles.

La negligencia o imprudencia en el uso de maquinaria puede suponer un delito medioambiental. Gracias a este protocolo, el año pasado no se produjo ningún siniestro por esta causa en la región.