Visita con trabas al portavoz socialista en la Asamblea, Juan Lobato

Con gritos de «Ayuso dimisión», «no al maltrato institucional, sí a la dignidad» o «comida decente en la Residencia» por parte de un grupo de residentes, familiares y miembros de Marea de Residencias han sido recibidos el portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, Juan Lobato, y su homólogo en el Ayuntamiento de Aranjuez, Oscar Blanco, cuando salían hoy a las 13:00 horas de la Residencia de Personas Mayores Santiago Rusiñol del Real Sitio.

Un centro, en el ojo del huracán desde hace tiempo por las denuncias sobre una alimentación deficiente, una climatización que deja mucho que desear y salpicado con sucesos como el presunto ataque a martillazos de un residente a otro o los disparos de otro con una pistola de aire comprimido desde su habitación y hacia otras dependencias del centro.

Tabla de contenidos

• Una visita con muchas trabas
• Un centro con grandes carencias y amenazas
• Comunicado del Comité de Empresa
• Iniciativas políticas

Una visita con muchas trabas

El PSOE, que solicitó el pasado mes de octubre una visita al centro y que fue citado para hoy, recibió hace unos días la comunicación de que ésta había sido cancelada y postergada al 12 de abril al parecer por cuestiones de agenda del gerente. «Nosotros hemos decidido venir» -ha explicado Oscar Blanco- «porque los residentes, familiares y trabajadores no soportan más la situación que están viviendo». Así, junto con Lobato y Blanco han estado los diputados autonómicos Lorena Morales, Jesús Celada y Javier Guardiola.

Los socialistas se han reunido con el Comité de Empresa en el interior de la Residencia. «Nos hemos encontrado muchas reticencias por parte de la gerencia para acceder al centro e incluso han negado la entrada a diputados, a concejales, a cargos públicos con el derecho y la obligación de conocer el estado de estos centros públicos. Al amparo de la Ley de Libertad Sindical hemos podido mantener el encuentro en su lugar de trabajo», ha explicado el portavoz socialista local.

Aún así, los trabajadores que han acompañado a la concentración de residentes, familiares, políticos del PSOE e integrantes de la Marea de Residencias no estaban autorizados ni siquiera a bajar los escalones del vestíbulo de acceso al centro, según han contado.

«Es sintomático que la Comunidad de Madrid tenga estos reparos y miedos a que vengamos a visitar las instalaciones» -ha expresado el portavoz socialista en la Asamblea- «con la intención de buscar las soluciones y las mejoras para que los mayores vivan mejor y los trabajadores puedan realizar mejor su trabajo».

Un centro con grandes carencias y amenazas

La Residencia, inaugurada en 1972, tiene actualmente 428 residentes empadronados en nuestra ciudad y un personal con menos de 400 personas. Las quejas del Comité y de los familiares se agrupan en cuatro grandes temas:

• Falta de mantenimiento del centro: Debido a las lluvias, hace dos semanas se desprendió parte del techo del comedor de asistidos, desalojados de allí con premura. Sin reparar el tejado se ha vuelto a colocar el falso techo. «El problema sigue ahí y este centro tiene amianto, así que la reparación debería ser mayor, más urgente y con más celeridad». Curiosamente, los familiares de algunos residentes comprobaron que ayer se estaba procediendo a la limpieza de cortinas, a la reparación de una escalera y hasta el repintado de unas protecciones en los escalones, aspectos en algunos casos reclamados sin éxito desde hace tiempo.
• Problemas de climatización: En relación al mantenimiento, «en verano no hay quien esté en el centro y en los días fríos del invierno sufren los rigores de la temperatura».
• Problemas con las externalizaciones: Problemas con el servicio de lavandería y con los proveedores de alimentos, «por eso los residentes se quejan de la mala calidad de la comida, no de los trabajadores, que se encuentran en situación precaria para confeccionar los menús porque no les llega la materia prima».
• Alto porcentaje de personas con dependencia: La falta de personal hace que los cuidados no sean los adecuados, «incumpliendo los ratios de asistencia» y se apunta a la acogida de personas con discapacidades mentales que deberían ser atendidos en otros centros especializados.

Juan Lobato ha manifestado que «estamos indignados porque en la Comunidad de Madrid, en cuatro años, no se ha movido un dedo para cambiar un milímetro de cómo funcionaban las residencias cuando comenzó la pandemia. Si hoy pasara lo mismo las consecuencias serían las mismas y eso es vergonzoso».

Por su parte, los representantes del Comité de Empresa han denunciado amenazas a los trabajadores por parte de algunos «residentes conflictivos», alguno de los cuales ha llegado a esgrimir una navaja amenazándole de muerte. El Comité se queja de la inacción de la gerencia del centro y exige soluciones a la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales.

Comunicado del Comité de Empresa

Desde este Comité de Empresa manifestamos el malestar que existe entre los trabajadores por todas las amenazas que están sufriendo por parte de algunos residentes conflictivos.
Últimamente estamos en los medios de comunicación por actos desagradables ocurridos en la Residencia, como lo ocurrido hace mes y medio con el acto del residente pegando disparos a las ventanas con una pistola de aire comprimido. A día de hoy el residente sigue aquí.
Este acto ocurrido el pasado sábado 9 de marzo se podría haber evitado, ya que anteriormente este mismo residente amenazó a un trabajador con una navaja diciéndole que le tenía que terminar matando. El trabajador informó a Dirección y ésta no tomó ningún tipo de medidas.
También los trabajadores de mantenimiento están amenazados por otro residente.
Ante todo lo ocurrido, este Comité de Empresa exige a la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales que se adopten las medidas necesarias para evitar que se vuelvan a repetir dichos actos.

Iniciativas políticas

Oscar Blanco ha anunciado que el PSOE presentará en el próximo Pleno de la Corporación una propuesta para que se solucionen los problemas «ante el miedo que tienen la alcaldesa y el PP de Aranjuez a pedir algo a Ayuso» mientras que Juan Lobato ha expresado que mañana en la Asamblea de Madrid habrá una interpelación para tratar este tema. «Será una fiscalización y un control sobre lo que está pasando en las residencias de la Comunidad de Madrid».

«Es indignante que el triaje en aquellos días no lo hicieran los médicos sino que fuera una cuestión política e ideológica y económica en algunos casos», ha declarado Oscar Blanco. «Esto inconcebible en ningún estado democrático y alguien tiene que ser el responsable».

«Es lamentable que cuatro años después no seamos capaces de conocer la verdad. No la queremos saber por revanchismo sino para que nunca más vuelva a pasar lo que pasó y tomar las decisiones que cambien las cosas que funcionaron mal», ha concluido Juan Lobato, añadiendo que «Ayuso ha bloqueado comisiones de investigación y de estudio. Eso es el PP de Madrid: opacidad y falta de transparencia en temas tan vitales como la dignidad de las personas mayores de estas residencias».