La religiosa, Amotinada Mayor, se traslada a Alba de Tormes

Sor Manuela, hermana de las Hijas de la Caridad, deja Aranjuez después de 40 años trabajando en pos de los desfavorecidos. “Como Hija de la Caridad considero que mi tarea es algo que debe hacerse desde el silencio y con la humildad evangélica. Como hija de este pueblo, amo Aranjuez y a sus gentes, y he tratado de atender siempre lo mejor que he podido a los pobres”, aseguró hoy en un acto de despedida en la Casa San José al que asistieron, además de las hermanas de la congregación, la alcaldesa, María José Martínez, y el delegado de Mujer, Mayores y Familia, Miguel Gómez.

Sor Manuela Fernández ingresó con 22 años en la Compañía de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul, y a lo largo de su vida ha atendido a innumerables familias y particulares, a personas enfermas, propiciando una integración social y laboral a mucha gente, especialmente a mujeres y al colectivo de inmigrantes de Aranjuez. Una labor por la cual el Ayuntamiento de Aranjuez le concedió en 2009 el título de Amotinada Mayor.

En 2013 Sor Manuela logró hacer realidad uno de sus sueños, poner en marcha el Comedor Social de Aranjuez en colaboración con el Ayuntamiento.

Apasionada de la poesía, con el poema ‘Gracias, Maestro’, dedicado al Maestro Rodrigo, forma parte del libro ‘En torno a Aranjuez’, que reúne los textos premiados en el VII Certamen de Poesía y Relato breve de la Universidad Popular de Aranjuez.

“Sabemos que no deseas un acto público, que tu humildad, sencillez y forma de hacer las cosas desde el anonimato también te van a acompañar en tu partida, sin embargo, como alcaldesa deseo hacerte llegar el gran cariño que te tiene la ciudad de Aranjuez, en la que has estado siempre en primera línea en acciones solidarias”, le dijo María José Martínez a Sor Manuela, a quien entregó un ramo de flores.