El Pleno de la Corporación Municipal ha aprobado el reconocimiento extrajudicial de créditos para pagar facturas por un montante de un millón de euros, a cargo del PIR de la Comunidad de Madrid. PSOE y Acipa, opinan.

El Ayuntamiento ha aprobado este reconocimiento de obligaciones por 1.034.944,18 euros, que serán pagados con el dinero existente en caja y que proviene del 25% del Plan de Inversión Regional (PIR) 2016-19 que se puede destinar para gasto corriente y cuya cantidad asciende a 2,1 millones de euros que deben ser gastados antes de final de este año. 

La aprobación en Pleno Extraordinario se ha debido a que estas facturas de 2019 y 2020 no pudieron reconocerse en el ejercicio correspondiente por falta de procedimiento y por ende no se pudieron imputar al Presupuesto correspondiente al estar cerrado. Por eso se ha procedido al reconocimiento extrajudicial y su imputación al Presupuesto 2020.

Entre ellas -de servicios y suministros al Ayuntamiento- las hay con retraso en su presentación, las que no contaban con crédito presupuestario y las que han tenido error de la Intervención General que no cumplen los requisitos establecidos por la Comunidad de Madrid para la justificación en la subvención otorgada por el 25% del PIR para gasto corriente.

Estas, seis en total, suman 1.428,43 euros y se han eliminado del listado del reconocimiento extrajudicial.

Opiniones del PSOE, Acipa e In-Par

La portavoz socialista, Montserrat García, ha expresado que su voto a favor es “por responsabilidad y por coherencia, algo que nunca ha tenido la derecha en nuestros años de gobierno”. La portavoz socialista ha recordado que “ya nos hubiese gustado, en la pasada legislatura, que el Partido Popular, Ciudadanos y Acipa hubiesen tenido la misma disposición y la misma comprensión en lugar de bloquear sistemáticamente las mismas propuestas con la misma justificación que ahora traen al pleno y que siempre votaban en contra, salvo alguna rara abstención de Acipa, que coincidía, curiosamente, cuando la votación iba a salir en contra”.

García sostiene que “con los 2,2 millones de euros para luz y gas, de los que solo han aplicado 1,7, con las medidas de pago de la anterior legislatura, con el pago de sentencias del ICO y los cerca de 800.000 euros con cargo al PIR deberían estar muy cerca de cancelar la deuda acumulada”, lo que para la portavoz socialista debería servir para que “a partir de estos momentos, estos reconocimientos extrajudiciales no se deberían volver a producir”.

Jesús Blasco, portavoz de Acipa agradece “los cambios realizados en la propuesta para mejorar su redacción. Nos parece correcto que se pueda destinar el dinero no solo al pago de facturas, sino también para necesidades estructurales de las distintas Delegaciones de Gobierno. Quedan proyectos pendientes que serán costeados por el próximo PIR que está por llegar. Seguimos lamentando que la cantidad presupuestada afine las cantidades necesarias para hacer frente al gasto derivado de las facturas eléctricas, porque año tras año comprobamos cómo el dinero presupuestado no llega para hacer frente a la cantidad real que se tiene que pagar”.

El portavoz de In-Par, Juan Carlos Ramírez, ha expresado que «en su mayor parte las facturas corresponden a suministros del ejercicio de 2019, lo que permite poder pensar que no se han pagado porque no se había previsto el gasto por el anterior gobierno o, también, se puede pensar que no se han pagado porque no se ha querido y se han priorizado otros pagos, mediante vinculación de partidas, por el actual gobierno. Cada cual, se apunta a la parte de la disyuntiva que considere».

«Las cuentas municipales deben contar con previsión. La ausencia de presupuesto daña enormemente la gestión, y hace que se vayan acumulando facturas que a la larga lastran a los servicios municipales y a las inversiones que Aranjuez necesita. Si no hubiéramos contado con la disposición extraordinaria de más de 1 millón de euros para el pago de estas facturas, no se habrían podido pagar, o bien habrían venido a final de año para aplicarlas al presupuesto sobre sobrante de otras partidas o se habrían quedado en el cajón esperando mejor momento, u otro nuevo plan de ajuste y así hasta el infinito», concluye Ramírez.