ENCUENTRO EN LA SALA COLORES: ALFONSO SEGOVIA Y SUS FOTOGREGUERÍAS DESDE EL TAJO
El 12 de diciembre, en la Galería Colores Series, se inauguró la exposición de Alfonso Segovia «Agua de Azar» que cierra el ciclo «Río y Cultura»organizado por Foro Cívico Aranjuez. La exposición permanecerá abierta hasta el 8 de enero de 2015
En la Sala Colores el Tajo tiembla, palpita, se reinventa, toma prestados rasgos humanos, bebe desiertos, y se vuelve caleidoscopio, de la mano de Alfonso Segovia ( el Druida del Rana Verde desde hace unos días) y de sus fotografías y gregüerías( humor más metáfora), que componen un reflejo que sugiere con palabras e imágenes una definición de la vida como algo fugaz, muy lejos de la eterna juventud que nos venden ahora, pero sin pesimismo (envejecer es vivir).La vida en el reflejo del río es trágicamente bella, y así lo debe pensar también Ricardo Lorenzo, el telonero del mago Segovia, un pescador de historias y anécdotas, que pisa de la misma manera los sueños y la realidad, el esperpento y el surrealismo, y que debe de tener un pacto secreto con el papel, por la destreza que tiene a la hora de elegir temas y darles la vuelta con su propia voz. El viernes 12 de diciembre nos regaló una selección de greguerías de Ramón Gómez de la Serna, pero también de chavales del IES Alpajés, que casaban a la perfección con la sombra y la luz caleidoscópica de Alfonso Segovia, con el agua y la corriente de nuestra efímera existencia. Me gustó mucho la greguería que utilizó para presentar “cuando por los altavoces anuncian que se ha perdido un niño siempre pienso que ese niño soy yo…». Ricardo parece que habla de él mismo y de Alfonso a la vez, de la mirada inocente que contempla el devenir de las horas. Y hay otra que me deja KO: “En el río pasan ahogados todos los espejos del pasado”. Es una burla y un ataque a la vanidad, la perdición de muchos artistas…
De todas las Fotogreguerías expuestas en Galería Colores Series no me quedo con ninguna, todas son el Tajo en sus infinitas vertientes, en únicos baños, como diría Heráclito. Desde el río como corriente de sangre y guerra “ríos de sangre abanderan el Tajo”, al río como origen que se burla y no se confiesa”Big bang de la ribera no hay quien te entienda”,pasando por un río de música “ Ay si tus ondas las firmara Rodrigo”, un río que se erotiza bordeando lo obsceno”balconing de en-verga-dura, deslumbrado como un paparazzi” «cartas de prensa amarilla”, mesiánico ”No hay dios que escriba sobre tu cielo reflejado”, o leve “vértigo en movimiento”
Pero siempre humano, y hasta parece que recibe la clemencia del autor de sus reflejos “!palpita!” el reflejo de la razón produce monstruos como sus sueños…
Cuando apagaron las luces de la sala me fui al Tajo, y no vi mi reflejo, se lo había llevado Alfonso y gracias a él pude fluir por una efímera y apacible noche.
David Abad