La Universidad Complutense aprueba deshacerse del CES Felipe II
El Consejo de Gobierno de la Universidad Complutense (UCM) ha decidido hoy con 34 votos a favor, 6 en contra y una abstención, deshacerse del CES Felipe II para que éste sea gestionado por la Universidad Rey Juan Carlos (URJC).
El Rector de la Universidad Complutense, José Carrillo, explicó que el coste del centro adscrito ribereño suponía un gasto de cinco millones de euros para la universidad que regenta y que su intención era la de centralizar los campus.
Con el acuerdo adoptado hoy, se aprueba la desascripción del centro ribereño de la Universidad Complutense y su adscripción a la Rey Juan Carlos. Tras ser aprobado el convenio por los órganos de decisión de ambas universidades, ahora será la Comunidad de Madrid la que deberá aprobar el proceso.
Incertidumbre
El comité de empresa del CES Felipe II ha señalado que el convenio puesto sobre la mesa para la desadscripción del CES Felipe II de la UCM y su adscripción a la URJC no garantiza la estabilidad laboral ni el mantenimiento de las condiciones salariales de docentes ni de personal de administración y servicios.
Para el delegado sindical de CC.OO. en el comité de empresa, Manuel Colmenar, este proceso se está manejando de un modo muy precipitado, dado que “existe una absoluta falta de información sobre el desarrollo del acuerdo que ambas universidades pretenden establecer”. Asimismo ha criticado que no haya un plan claro sobre el futuro del personal y sus condiciones laborales lo que está provocando una gran incertidumbre entre los trabajadores
Paralización del convenio
Por su parte, los representantes de los alumnos de las universidades Complutense y Rey Juan Carlos solicitaron, tras la marcha de protesta organizada hacia el Rectorado, la paralización del convenio así como la apertura de un proceso de diálogo y negociación entre todas las partes afectadas. Según explicaron los representantes del alumnado en un comunicado, las negociaciones entre universidades no han sido informadas ni consultadas a los estudiantes ni a los trabajadores. Tampoco se ha aportado informe jurídico, plan estratégico, calendario de implantación de las nuevas titulaciones, ni información sobre los procesos administrativos y judiciales que asumiría la Universidad Rey Juan Carlos. Por otro lado recuerdan que, tras la firma del convenio, deberá someterse al proceso de verificación de ANECA los planes de estudios del Grado en Gestión Informática Empresarial y del Grado en Traducción e Interpretación, que actualmente no se ofertan en dicha Universidad, para lo cual consideran que “no hay tiempo suficiente para presentar un proyecto de calidad a la Agencia de Evaluación de la Calidad en vista de los plazos estipulados para el procedimiento de acreditación de los Títulos Oficiales de Grado”.
