El carricoche
No hace falta cantar eso de «doce cascabeles lleva…» ni aquello de «mi jaca, galopa…» para disfrutar de un paseo en coche de caballos por la ciudad. Imagen casi de otra época.
No hace falta cantar eso de «doce cascabeles lleva…» ni aquello de «mi jaca, galopa…» para disfrutar de un paseo en coche de caballos por la ciudad. Imagen casi de otra época.