[ Emma Vaquero. MÁS ] Natural de Murcia, Carlos Santos es un actor con diversos registros en series de TV, largometrajes, cortometrajes y doblaje. Conocido por papeles como el de Luis Roldán en “El hombre de las mil caras” por el que recibió el Goya a Mejor Actor Revelación en 2017; el papel de José Luis Povedilla en la serie “Los hombres de Paco”, o de Félix Aranda en “El tiempo entre costuras”, regresa ahora al teatro con la comedia “Volvió una noche”, dirigida por su paisano César Oliva en la que Santos ha sido artífice de gran parte de la génesis del proyecto. El próximo 12 de julio a las 21:00 horas la obra se representa en el Teatro Carlos III de Aranjuez tras su rotundo éxito en Murcia, con aforo completo en las dos representaciones que tuvieron lugar en el Teatro Romea.

Protagonista junto a Beatriz Carvajal de esta comedia que trata temas tan serios como la influencia del pasado en el presente, el conflicto entre tradición y modernidad o la desmitificación de la muerte, entre otros. ¿Hace falta reírnos un poco más de cuestiones de seriedad?

Yo soy de los que piensa que de cualquier tema se puede hacer humor, y luego cada uno es libre de elegir qué humor le gusta, qué humor comparte o qué humor le divierte. El que no le guste desecharlo y el que le haga gracia o entusiasmo lo comparta. Así que sí, en estos tiempos que corren que parece que nos quieren amordazar un poco en ese sentido, sí, todo puede ser motivo de hacer humor porque la vida sería terrible sin humor.

La muerte es uno de los temas importantes de la obra, ¿Qué otros temas van a encontrar los espectadores en ella?

La muerte, efectivamente es uno de los temas que se abordan precisamente porque contamos con una persona muerta -Beatriz Carvajal- que es la protagonista, pero no es el tema principal. El tema principal es otro, la fuerza que ejercen los padres sobre los hijos y la dependencia mutua que se genera. Un ajuste de cuentas materno filial sería el tema central de la obra junto a la felicidad de las pequeñas cosas. No hace falta tocar en la Sinfónica de Londres si te gusta la música, sino quizás, tocar en un Café Teatro. Lo que se va a encontrar el espectador es una obra en la que se tratan temas importantes como bien apuntas, pero siempre desde el punto de vista humorístico. Siempre cito a Mary Poppins que con un poco de azúcar las reivindicaciones importantes siempre entran mejor. Se va a encontrar una comedia con unos actores fabulosos -Beatriz Carvajal, Daniel Ortiz, Berta Hernández o Pedro Segura- una puesta de escena estupenda, con música en directo, en definitiva, una obra muy completa que además de hacerle reír les va a hacer pensar.

¿Qué te llevó a decir “sí, quiero” a tu paisano, al director César Oliva cuando te propuso volver al Teatro con tu papel como Manuel en la obra?

La verdad es que fue un poco al revés. Llevábamos mucho tiempo buscándonos Cesar Oliva y yo para repetir lo que vivimos en el Aula de Teatro de la Universidad de Murcia, y por una razón o por otra no habíamos podido coincidir hasta que cuadramos agenda. Le propusimos que nos pasara obras que quisiera dirigir y en cuanto leímos –tanto la productora como yo- “Volvió una noche”, nos lanzamos a trabajar juntos. Muchas ganas de coincidir con un equipo muy murciano, Paco Segura que es cartagenero, el director de escenografía, Paco Leal que también es de Murcia, así como la productora…

Háblanos de Manuel, de tu papel en la obra.

Manuel es un tío normal que siempre ha estado a la sombra de su madre dominado por la personalidad férrea de ella. Cuando comienza la función le vemos visitando la tumba de su madre, quien esperaba grandes cosas de él pese a haber escogido otros caminos sin grandes aspiraciones. Es un personaje con muchos claro-oscuros, y por ello le hace parecer un ser humano de verdad. No es héroe ni antihéroe, sino lo que somos todos. A lo largo de la obra vamos viendo cómo se desarrolla esa personalidad tan marcada por la madre y cómo consigue desembarazarse de esa mano de hierro que ha ejercido siempre sobre él.

¿Cómo te preparaste para él?

A través de las directrices del director y tu propia intuición. Es necesario comprender la obra, a los actores nos falta mucho comentario de texto a la hora de abordar los personajes y menos emociones, menos Stanlisvaski y “actors studio”, y más entender qué quiere contar cada escena, el autor y cada personaje en cada momento.

Una obra con largo recorrido, no solo por su longevidad desde 1993, sino también por su extensión, habiéndose representado en países como EEUU, Cuba, México, Israel, Brasil, Finlandia, Paraguay o República Checa, país donde lleva en escena 16 años. ¿Se aprecia esa trayectoria?

He de decir que poco después del estreno el autor de la obra Eduardo Rovner falleció. Estuvo a punto de venir desde Argentina, por lo que fue un grandísimo homenaje hacer esta función. Ha sido duro, pero sirva de homenaje esta gira para Rovner y su familia. En la adaptación de César se han modernizado algunos detalles para que no parezca de 1993 sino de 2018, pese a ese halo a clásico, a Miura, Javier Poncela. La hemos querido traer a nuestros días en música, personajes y texto para una mayor comprensión.

Esta vez “lidias” con la comedia, pero te has visto envuelto en muy diversos registros que te han llevado incluso a alcanzar el Goya como Actor Revelación en 2017 por tu personaje como ex director de la Guardia Civil Luis Roldán en el film “El Hombre de las mil caras” (2016) … ¿Se vive igual después de recibir un galardón de estas características?

Se vive exactamente igual, esperando nuevos retos con ganas de enfrentarte a nuevos personajes. No se puede vivir del pasado sino de lo que viene por delante y eso es lo que mantiene con muchas ganas.

No podíamos no preguntarte sobre uno de tus últimos trabajos como actor en el Cortometraje “Miedos” del ribereño Germán Sancho que tantos premios está cosechando desde su estreno. ¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar con él y cuál fue tu sensación tras ver el resultado final?

Muy contento del recorrido y aceptación que está teniendo el Cortometraje “Miedos” de Germán. La verdad que muy satisfecho desde que leí el guion y me contó cómo quería hacer y rodar la historia. Al ver el resultado final quedé maravillado, como está quedando cada festival al que se presenta el corto, con una niña impresionante como Claudia Placer. Ahora estamos de camino a los Goya, a ver si consigue Germán nominación que sería estupendo para poner la guinda al pastel.